Cuando se acaba el deseo
abril 18, 2014 1:52 pm

Aunque es normal que una relación larga viva etapas activas y otras más pasivas, lo cierto es que si los encuentros sexuales desaparecen, hay que encender las alarmas de la relación.

 

Culturalmente, se tiene la idea de que el hombre piensa en sexo todo el tiempo y, digamos que la creencia no está tan desligada de la realidad. Pero lo que aclara el doctor Juan David Nasio, argentino, sicoterapeuta y profesor de la Universidad Sorbona en París en una entrevista al diario La Nación, es que la mayoría de sus consultantes son mujeres insatisfechas sexualmente. Según el experto, ellas le atribuyen más importancia a este aspecto de la pareja, como base para una relación exitosa.

 

Y la mujer está satisfecha sexualmente cuando “se siente deseada, donde se siente que es conducida por el hombre al orgasmo. Una mujer enamorada es siempre una mujer que tiene una satisfacción orgásmica con el hombre del cual está enamorada. Cuando usted ve una mujer enamorada de un hombre, debe saber que esa mujer está sexualmente satisfecha».

 

Por eso, la sexualidad, según los expertos, es uno de los pilares fundamentales de una pareja que lleva una relación exitosa. De acuerdo con el doctor Nasio, los demás debe ser: admiración mutua, diálogo y realización de proyectos comunes. Y si alguno falla, la mesa cojea.

 

De acuerdo con la sicóloga Rocío Hernández, directora del Club de la Buena Vida, As Buena Vida, existen varios factores que a pesar de la diferencia entre parejas, se convierten en señales de que una relación está en agonía. Una de ellas es la problemática sexual.

 

Aunque es normal que con el paso del tiempo la actividad disminuya y entre en periodos de monotonía, no hay que alarmarse si es evidente que el deseo aún persiste. “Por ejemplo, si la pareja ha tenido un descenso en sus encuentros debido a la rutina o a horarios laborales absorbentes y alguno de los dos llama la atención sobre la situación, la respuesta de la otra persona debe ser positiva y hacen lo posible para reinventarse”, dice la experta. Entonces, se van de vacaciones, dejan los niños en casa de los abuelos, cambian de espacio y pasan una noche en un hotel o cualquier otra actividad.

 

Pero si el nivel de encuentros sexuales baja a cero y no se ve la motivación para retomarlos, algo serio está sucediendo y no se puede pasar por alto esta señal. Aunque no es un motivo para acabar de tajo con la relación, al ignorarse esta circunstancia puede que luego sea demasiado tarde para remediarlo y, como dice la sicóloga, puede que hace tiempo la pareja ya se haya marchado. No física, sino emocionalmente. “Hay parejas que se conforman con decir que son buenos amigos, pero tú no tienes sexo con tus amigos y si no hay sexualidad, no hay pareja”, puntualiza.

 

Para el sicoterapeuta argentino, la vida sexual debe ser como las conversaciones en pareja. Es decir, debe haber encuentros una, dos o tres veces por semana.

 

Los expertos recomiendan hablar. Sentarse, verse a los ojos y expresar sus emociones para generar cambio; pero si esto no sucede y la conversación no termina en actitudes reparadoras, conviene buscar a un tercero. En estos casos, el más idóneo es un terapeuta de pareja que les permita reconocer cuál es la causa para estar desmotivados sexualmente, si hay recursos para continuar o es tiempo de despedirse.

 

Fuente: Fuscia.co