La fotógrafa Nancy Borowick tuvo que lidiar con la trágica situación de que el cáncer atacara a las dos partes de la pareja que formaban sus padres. El efecto fue devastador.
Sin embargo, lejos de tirar la toalla, el matrimonio decidió unirse aun más en esta nueva etapa y aferrarse mutuamente. La actitud dejó un legado terriblemente emotivo. Aprovechando la profesión y el talento de su hija, se prestaron para documentar todo el proceso que muestra los distintos momentos que vive un matrimonio en ese duro camino hacia la cura de un enfermedad.
A Howie y Laurel se les detectó un cáncer al mismo tiempo
Llevaban 34 años juntos y afrontaban esta nueva etapa más unidos que nunca
Justo antes de empezar el tratamiento, la pareja decidió viajar a Nápoles (Italia) y tomarse unos días de descanso
A Howie le detectaron cáncer de páncreas. En esta foto aparece tomándose un descanso en las cálidas aguas de Florida. La quimioterapia le dejaba muy mermado de fuerzas
Laurel, con cáncer de mama, decidió cortarse el pelo de madrugada
No era la primera vez que Laurel se enfrentaba a un cáncer de mama. Esta era su tercera vez. Solo tenía un pecho
Sin embargo, Laurel no quería lucir su cabeza desnuda, por eso decidió ponerse una peluca
Tomaban sus sesiones de quimioterapia uno al lado de otro
La quimioterapia dejaba a Howie bastante exhausto
A pesar de la dureza de la situación, tenían sus momentos de alegría y optimismo
Y también sus momentos de flaqueza, pero ahí siempre estaba uno de los dos para reconfortar al otro
La foto de arriba es del día en que recibieron la noticia de que el tratamiento de ambos estaba surgiendo efecto
Fueron capaces de celebrar el cumpleaños de Howie juntos. Esto parecía imposible meses antes. Después de un tiempo, Howie sucumbió a la enfermedad y murió. Sin embargo, esos meses de lucha junto a su mujer y tres hijos fueron inolvidables, cargados de buenos momentos que su hija se encargó de retratar.