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El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, avivó su pulso con la Corte Suprema al participar en un acto de apoyo a Daniel Silveira, diputado de ultraderecha que indultó un día después de ser condenado por ese tribunal por graves ataques a la democracia.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, avivó este miércoles su pulso con la Corte Suprema al participar en un acto de apoyo al diputado de ultraderecha que indultó un día después de ser condenado por ese tribunal por graves ataques a la democracia.
“Los poderes existen para que sean respetados, no para mostrar que uno es más fuerte que otro”, aseveró el mandatario ultraderechista en la ceremonia, celebrada en el Palacio de Planalto, sede del Gobierno brasileño, y al que asistieron decenas de diputados aliados.
El acto fue organizado por la llamada “bancada BBB”, que defiende en el Parlamento los intereses de las industrias de armas (“bala”), de los evangelistas (“Biblia”) y de los grandes hacendados (“bueyes”), que representan a los sectores más conservadores de la sociedad.
El jefe de Estado defendió a capa y espada a Daniel Silveira, “un cabo de la Policía Militar, ahora diputado” federal y quien la semana pasada fue condenado a casi 9 años de prisión por amenazar al Supremo y a otras instituciones democráticas, y por hacer apología a la dictadura, en otros delitos, e indultado por el propio gobernante.
“Están pasando situaciones absurdas en Brasil”, manifestó Bolsonaro, quien afirma que ve un “cercenamiento de la libertad de expresión” por parte del Poder Judicial.
Bolsonaro también comparó la situación de Silveira con la de la expresidenta transitoria de Bolivia Jeanine Añez, en prisión preventiva por presuntamente actuar contra el orden democrático de su país, entre otras acusaciones.
“Todo el mundo que quiere ser respetado, tiene que respetar en primer lugar. El indulto es constitucional y será cumplido”, sentenció, en alusión a los recursos interpuestos por partidos de la oposición contra el mismo y que aún deben ser analizados por el pleno del Supremo.
Bolsonaro señaló directamente a Luis Roberto Barroso, uno de los once jueces del Supremo y a quien acusó de “mentir” al sembrar dudas sobre el papel de las Fuerzas Armadas con relación a las elecciones presidenciales de octubre, en las que intentará renovar su mandato.
Barroso afirmó el pasado domingo en una videoconferencia que las FF.AA. están siendo orientadas a “atacar” y “desacreditar” el proceso electoral brasileño.
“¿Qué irresponsabilidad es esa? Ese no es el papel de alguien demócrata y que lucha por la libertad (…) Están mandando y desmandando y, ¿no podemos criticarlos?”, dijo refiriéndose a Barroso.
En este contexto, el gobernante, un capitán retirado del Ejército, volvió a poner en duda el sistema electrónico de votación, que funcionó en Brasil desde 1996, pero que él considera, sin pruebas, “fraudulento”, y pidió que se acepten las sugestiones dadas por los militares para mejorar el conteo de los votos.
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