Spinning, running, body-pump o aeroyoga son solamente algunas de las nuevas disciplinas que hay hoy en día en los gimnasios. Son divertidas, y es bueno probar cosas nuevas para retar a nuestro cuerpo, pero a veces nos olvidamos de que lo más sencillo puede también ser realmente efectivo. Por eso os descubrimos los beneficios de uno de los deportes universales más simples, que están al alcance de cualquiera: el caminar.

 
Los beneficios de andar comienzan por lo que os hemos dicho, y es que es accesible a todo el mundo. Tengamos el fondo físico que tengamos, o si nuestro presupuesto es reducido, siempre podemos calzarnos unas cómodas zapatillas y empezar a caminar. Así de fácil, sin complicarnos la vida y con material básico.

Esta disciplina fortalece el corazón, evitando en gran medida el padecer enfermedades cardiovasculares. También reduce el colesterol, por lo que se recomienda a casi todo el mundo. También combate la obesidad, al ser un deporte que pueden hacer las personas más sedentarias, ya que no exige altas dosis de intensidad.

Te hace perder peso o mantenerte en tu línea. Dependiendo de lo que desees, puedes andar durante más tiempo, con una intensidad baja o más alta. Si lo acompañas de una dieta equilibrada, notarás que estás perdiendo peso, ya que se queman calorías en cada sesión. Tu cuerpo también se verá más tonificado con este deporte, sobre todo si incluyes cuestas en el recorrido, que fortalecerán muslos y glúteos.

Todos estos beneficios se notan al cabo de un tiempo. Evidentemente, en este deporte, como en cualquier otro, se necesita constancia, pero la facilidad para realizarlo lo convierte en uno de los favoritos de muchas personas. Solo tienes que hacerte con un calzado y ropa cómoda y salir a caminar, solo o acompañado con tus amigas o en asociaciones de senderismo, donde hallarás a mucha más gente con esta afición.

Fuente: Nosotras