El presidente ejecutivo de Avior, Juan Bracamonte, aseguró este martes 21 de julio que desde la aerolínea se han estado tomando medidas para mantenerse operativos ante la crisis del coronavirus, que mantiene a las compañías del sector en tierra sin poder generar ingresos. A su juicio, en la actualidad se alcanzó un «pico» en la situación económica porque «los ahorros se han ido volando».

Bracamonte explicó que el negocio aéreo es financiero y de «rotación», porque se necesita de la banca y créditos para ir cubriendo las operaciones de toda índole, incluyendo la nómina de empleados, que en el caso de Avior asciende a 1060 empleados certificados que tienen ingresos superiores al resto de la media.

Resaltó que a pesar del panorama, se encuentran listos para cuando las autoridades venezolanas decidan dar la autorización correspondiente. Sin embargo, proponen al INAC que esa fecha de arranque sea el próximo 1° de septiembre, debido a que en otras terminales aéreas como El Dorado, en Bogotá, tienen previsto iniciar el día indicado.

«La aviación se maneja con otro lenguaje que funciona bien. Está alejada de otras circunstancias (…) hay varios países que arranca el 1° de septiembre. Para ello se depende del INAC, pero también depende de la Comisión Presidencial, que ve la situación del coronavirus en 360 y considerarán si eso es posible», resaltó en entrevista para Unión Radio.

Juan Bracamonte manifestó estar en contra del bloqueo de la ruta comercial entre Caracas y Miami, como consecuencia de las sanciones impuestas por Estados Unidos, ya que de alguna forma perjudica a los venezolanos porque en vez de las tres horas y media que hacía con un vuelo sin escalas, tarda ahora ocho horas en alcanzar Miami, donde tiene que pagar doble impuesto. En ese sentido, pidió a las autoridades que reconsideren la medida.

«Avior es la única linea con permiso de volar a EEUU, así como lo tiene American Airlines de hacerlo a Venezuela. Tenemos una aviación permisada, viable y operativa. Con estas sanciones,  los venezolanos pagan hasta 2.000 dólares para llegar a Miami. Uno de los sectores afectados en la economía son las camaroneras, porque parte de su pesca viajaba a Estados Unidos por aviones de carga», dijo.

También indicó que la repatriación de los fallecidos en el exterior ha sido una dificultad para los venezolanos, al igual que para todos en general. Las líneas aéreas también se han visto afectadas en sus operaciones en tierra por esta dificultad porque con las medidas, se ha tenido que reducir la nómina. Por ejemplo, en el caso de Avior, dijo que antes de las disposiciones de no poder viajar a EEUU, la nómina estaba en 2.000 empleados.

Sin embargo, reveló que están haciendo lobby en EEUU, al igual que American Airlines, para poder reactivar la ruta Barcelona-Miami y viceversa. Expresó que en el caso de la aerolínea estadounidense, un vuelo a Venezuela le sale mucho más rentable que viajar de Miami a Nueva York.

Destacó que el reinicio de actividades estará complementado con todas las medidas sanitarias correspondientes, ya que han adaptado todas las recomendaciones hechas por la IATA y la OACI (órgano de la ONU), con todo lo que tiene que ver la limpieza y adecuación de los aviones para poder volar, al igual que todo el personal.

Reconoció además que el hacer pruebas PCR tendrá «costo enorme» para los ejecutivos y los aeropuertos, pero su implementación «elimina hasta los riesgos de volar» porque el coronavirus también «atacó la parte psicológica», poniendo como ejemplo el vuelo de repatriación de venezolanos de Madrid a Caracas, quienes hicieron esos test para poder abordar la nave.

La psique se afectó porque el virus se propagó en las ciudades con mayor tráfico aéreo como Miami, Madrid, Barcelona, Nueva York, Panamá y Bogotá, «hubs» importantes por la posibilidad de interconexión aérea. Para Juan Bracamonte, esto es una oportunidad para el mercado venezolano de regresar a ser un punto importante y hasta de ser parte del Producto Interno Bruto (PIB), ya que las autoridades también adecuaron el precio de la unidad tributaria y se adecuaron a las normas internacionales.

Eso, según su opinión, permite la posibilidad de que más aviones puedan pasar por el espacio aéreo de nuestro país. Además, recordó que Venezuela tiene una posición privilegiada desde el punto de vista geográfico al estar al norte de Sudamérica. «Si se quisiera en este momento, no hay mejor oportunidad que esta. Todos estamos en cero. Es nuestra oportunidad de ser un hub. Tenemos un buen aeropuerto (…) lo otro sería vender el combustible un poco más barato, eso obligaría que haya más paradas en las terminales aéreas del país y sería potencial para el crecimiento de la nación».

Aseguró que los aviones en la actualidad tienen un cuidado preventivo en sus niveles máximos, pasando por el despojo de todos los fluidos de las aeronaves para evitar que se dañen. También, enfatizó que para que cuando se reinicien las actividades, tienen ya algunas rutas que van a retomar como Caracas-Bogotá; así como a Medellín y Cali. Su medida también contempla los vuelos a República Dominicana y las alianzas con operadores turísticos de Colombia que han vendido como destino la isla de Margarita, en el estado Nueva Esparta.